China advirtió que mantendrá su estricto control en Internet y bloqueará cualquier texto que considere subversivo o perjudicial para la “unidad nacional”. El régimen de Pekín dio a conocer su Libro Blanco, en el que expone su política oficial a tres meses de la polémica sobre la censura que llevó a Google a cerrar su motor de búsqueda en el territorio continental.
Este libro sobre Internet destaca en sus 31 páginas que permanecerá la prohibición de informaciones “contra los principios de la Constitución; que pongan en peligro la seguridad, el honor o los intereses del Estado, divulguen secretos estatales y subviertan el poder estatal”.
También restringirá aquellos datos que instiguen el “odio interétnico o discriminación” o los que diseminen “herejías, supersticiones, rumores, ideas que quiebren el orden y la estabilidad social” así como “obscenidades, pornografía, apuestas ilegales, violencia, brutalidad y terror”.
Según datos oficiales, China tenía 384 millones de cibernautas en 2009, casi el 29% de la población, y ahora el Gobierno quiere elevar la cifra a 45% en los próximos cinco años. Pero con la divulgación de este Libro Blanco, no se están dando señales de flexibilizar la llamada “Gran Muralla Cortafuego”, la red oficial de filtros en el gigante asiático.
Este libro sobre Internet destaca en sus 31 páginas que permanecerá la prohibición de informaciones “contra los principios de la Constitución; que pongan en peligro la seguridad, el honor o los intereses del Estado, divulguen secretos estatales y subviertan el poder estatal”.
También restringirá aquellos datos que instiguen el “odio interétnico o discriminación” o los que diseminen “herejías, supersticiones, rumores, ideas que quiebren el orden y la estabilidad social” así como “obscenidades, pornografía, apuestas ilegales, violencia, brutalidad y terror”.
Según datos oficiales, China tenía 384 millones de cibernautas en 2009, casi el 29% de la población, y ahora el Gobierno quiere elevar la cifra a 45% en los próximos cinco años. Pero con la divulgación de este Libro Blanco, no se están dando señales de flexibilizar la llamada “Gran Muralla Cortafuego”, la red oficial de filtros en el gigante asiático.
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