El día de hoy, mientras revisaba algunas de las noticias más importantes en la red sobre la reelección de legisladores y, al mismo tiempo, me tomaba un café bien cargado encontré una nota de El Universal en línea titulada “Recomienda Sartori reelección de legisladores”. Dicha nota apareció el miércoles 11 de abril del 2007.
En seguida di las gracias a la maravillosa red de Internet puesto que representa una importante fuente de información muy completa y permite acceder a los archivos menos recientes de forma sumamente fácil. En fin, el afamado politólogo italiano argumentaba que la reelección de legisladores permitiría la construcción de un parlamento realmente serio en México.
En la conferencia "Democracia y Reforma Política: Una propuesta de agenda para México" , celebrada en la Facultad de Derecho de la UNAM, el pensador dijo que la reelección de los integrantes del Congreso de la Unión debe funcionar como una especie de "recompensa". Este argumento ha sido también ampliamente utilizado por las fracciones políticas comprometidas a llevar adelante la reforma política de Felipe Calderón.
Pensé entonces que Sartori no apoyaba demasiado su punto de vista. "Los miembros del congreso -dijo- deben de ser reelegibles, se necesita mucho valor para decir esto pero este es el único momento, este es el único país en el que no son reelegibles, y a menos de que no tengan legisladores reelegibles no pueden tener un parlamento serio".
Precisó además que la reelección de legisladores es un procedimiento que contempla el castigo o costo político para los malos políticos. Y añadió: "si ustedes el Parlamento lo utilizan durante cuatro años para poder encontrar otra apuesta, pues este no es un parlamento serio, por supuesto que este sistema era un instrumento de control muy fuerte de la presidencia mexicana, donde el presidente proporcionaba trabajo" con el objetivo de tener un poder legislativo suave que ayudara a sus objetivos.
Hasta aquí me parece justo aclarar que Sartori es una autoridad en cualquier tema político. Es decir, no me atrevería a contrariarlo en ninguno de los puntos más que en lo referente al contexto en los hábitos políticos ciudadanos. Para afirmar si algo es necesario o no se necesita realizar un estudio analítico sobre las condiciones reales. Pero dada su condición de politólogo altamente reconocido, sus palabras pueden ser peligrosas. Sartori actúa como un lider de opinión.
Según sus conocimientos, el italiano estima que los integrantes del congreso "piensan: nosotros estamos aquí solo cuatro años y van a llegar otras personas, creo que el parlamento debe ser educado, serio, al mismo tiempo el presidente debe ser una entidad mucho más importante". Estoy de acuerdo con su punto de vista hasta el momento en que no nombra al presidente.
Desde la toma del poder por parte de Felipe Calderón se han tomado una serie de decisiones catastróficas para el bienestar del país. Baste recordar en este momento la guerra iniciada por él contra el narcotráfico y los saldos tan negativos que hemos recibido.
Así pues, cabe pensar seriamente si las palabras de Sartori y sus juicios políticos merecen tanto reconocimiento.
En seguida di las gracias a la maravillosa red de Internet puesto que representa una importante fuente de información muy completa y permite acceder a los archivos menos recientes de forma sumamente fácil. En fin, el afamado politólogo italiano argumentaba que la reelección de legisladores permitiría la construcción de un parlamento realmente serio en México.
En la conferencia "Democracia y Reforma Política: Una propuesta de agenda para México" , celebrada en la Facultad de Derecho de la UNAM, el pensador dijo que la reelección de los integrantes del Congreso de la Unión debe funcionar como una especie de "recompensa". Este argumento ha sido también ampliamente utilizado por las fracciones políticas comprometidas a llevar adelante la reforma política de Felipe Calderón.
Pensé entonces que Sartori no apoyaba demasiado su punto de vista. "Los miembros del congreso -dijo- deben de ser reelegibles, se necesita mucho valor para decir esto pero este es el único momento, este es el único país en el que no son reelegibles, y a menos de que no tengan legisladores reelegibles no pueden tener un parlamento serio".
Precisó además que la reelección de legisladores es un procedimiento que contempla el castigo o costo político para los malos políticos. Y añadió: "si ustedes el Parlamento lo utilizan durante cuatro años para poder encontrar otra apuesta, pues este no es un parlamento serio, por supuesto que este sistema era un instrumento de control muy fuerte de la presidencia mexicana, donde el presidente proporcionaba trabajo" con el objetivo de tener un poder legislativo suave que ayudara a sus objetivos.
Hasta aquí me parece justo aclarar que Sartori es una autoridad en cualquier tema político. Es decir, no me atrevería a contrariarlo en ninguno de los puntos más que en lo referente al contexto en los hábitos políticos ciudadanos. Para afirmar si algo es necesario o no se necesita realizar un estudio analítico sobre las condiciones reales. Pero dada su condición de politólogo altamente reconocido, sus palabras pueden ser peligrosas. Sartori actúa como un lider de opinión.
Según sus conocimientos, el italiano estima que los integrantes del congreso "piensan: nosotros estamos aquí solo cuatro años y van a llegar otras personas, creo que el parlamento debe ser educado, serio, al mismo tiempo el presidente debe ser una entidad mucho más importante". Estoy de acuerdo con su punto de vista hasta el momento en que no nombra al presidente.
Desde la toma del poder por parte de Felipe Calderón se han tomado una serie de decisiones catastróficas para el bienestar del país. Baste recordar en este momento la guerra iniciada por él contra el narcotráfico y los saldos tan negativos que hemos recibido.
Así pues, cabe pensar seriamente si las palabras de Sartori y sus juicios políticos merecen tanto reconocimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario